Lunes 8 de agosto, 2022
Esta mañana hice una meditación guiada.
En ella me pedía que viese fuera de mí a un ser iluminado digno de mi admiración que venía a ayudarme.
Primero pensé en mi mamá, pero al guía dar ejemplos se buscaba a un ser divino, un ícono como Jesus, Buddha, Gandhi. Yo entonces escogí a La Virgen María.
Ella estaba vestida de blanco e irradiaba una luz cálida y palpitante. Ella tenía un regalo que darme.
Cuando pensé ¿qué regalo me daría? Se me ocurrió un vaso de agua. No sé porqué. No parece un gran regalo pero eso vino a mi mente y luego yo tendría que pensar en la función del regalo.
Me vino
- Aquí está el vaso de agua. Contémplalo.
En algún momento, cualquier cosa que no pueda ser disuelta caerá como sedimento al fondo del vaso. Y solo cuando se esté muy tranquilo no verás la superficie vibrar.
Ese fue el regalo de la virgen- un vaso de agua. ¡Gracias!
No comments:
Post a Comment