Habían quedado en el florero -
las flores
estáticas e inflexibles. Se había secado -
el agua.
Una capa fina de gris polvo, gris nube, gris soledad -
las cubría
sin totalmente opacarlas -
las flores.
Habría de llegar entonces la lluvia -
la madre
Iluminando y limpiando el gris de las hojas -
la hermana.
Hicieron relucir el rojo guayaba, el azul caribe, el verde helecho -
la flor
que estaban bajo el gris lejanía, gris neblina, gris nostalgia -
yo
4 comments:
Rene, bello y tierno tu poema, lo sentí profundamente y no pude evitar unas lagrimitas; estoy contenta. No importa lo corto del tiempo que pasamos juntos, lo importante fué que estuvimos juntos y que todos, Renie, Skylr, Susi, tú y yo pudimos disfrutar riendo, paseando, cantando y compartiendo. Qué bueno que todos estaban de vacaciones, fué una semana especial muy intensa y espero poder repetirlo. Gracias por atendernos con tanta generosidad y entusiasmo! Te quiero mucho y te bendigo cada día.
Gracias a las flores, a la lluvia, a la madre y a la hermana. Bello Rene.
Bello! nada como una mama y una hermana!
y a cambio...
caminatas con “suculentas” vientos del pacífico;
Emociones musicales con la fuerza del gospel, las palmadas del tanguillo y los tambores de Barlovento;
Aromas de chocolate, café y muffins con mantequilla Y queso crema;
La filosofía matinal;
Risas impresionistas y renancentistas;
Carcajadas jonicas (o doricas ?),
y un barro en mi preciosa nariz, en mi nariz, en mi nariz...
Te quiero mucho
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